Puedes tener más tiempo para lo importante.
Dotar de autonomía a los trabajadores de tu empresa está íntimamente relacionado con una mayor satisfacción laboral.
Los empleados se sienten valorados y son capaces de llevar a cabo sus tareas con un mayor rendimiento.
En el post anterior hablamos sobre los múltiples beneficios de fomentar la autonomía en tu puesto de trabajo, pero te estarás preguntando:
Estar dispuesto a confiar en los empleados implica aceptar los riesgos que pueden acompañar a las acciones que se van a realizar.
Cuando los líderes se rehúsan a delegar en sus empleados éstos lo interpretan como una falta de confianza en sus capacidades, originando un clima de desconfianza, así como una falta de iniciativa y autonomía por parte de los empleados.
Para rectificar este hecho, es importante ir poco a poco y aumentar gradualmente las responsabilidades y libertades de los empleados a medida que estos van demostrando más capacidades.
Así evitamos el error de ofrecer de golpe una autonomía abrumadora que quizas sea difícil de controlar.
Aquellos líderes que resultan ser demasiado críticos con el trabajo y concretamente con los errores de sus empleados, acaban con la iniciativa y la creatividad de éstos, y como consecuencia rompe con el compromiso que tienen con la organización.
Tener reuniones periódicas para monitorear y revisar el progreso en relación con las metas y los plazos así como identificar los obstáculos y dificultades, ha demostrado tener resultados muy positivos. De esta manera los empleados y gerentes tienen la oportunidad de plantear inquietudes y celebrar los éxitos de aquellos que lo han alcanzado en la realización de tareas.
Realizar un proceso de selección adecuado puede resultar en un cambio en la cultura de la organización y que de esta forma, ésta pase de tratarse de lugar donde predomina el mando y el control hacia otro donde prevalece la autonomía.
Algunas personas requieren dirección y supervisión constante, mientras otras consideran que son más prósperas en ambientes donde se sienten su propio jefe y tienen libertad en la toma de decisiones. Esta diferenciación hace fundamental que se indague en este hecho durante las entrevistas y la incorporación del candidato.
Es importante, para realizar bien este proceso de dotar autonomía a los empleados, que los gerentes se aparten y no estén haciendo microgestiones o poniendo barreras innecesarias a la independencia.
Como líderes es interesante dotar de libertad al equipo para que desarrollen sus competencias y su autorealización completando tareas según sus propios criterios, mientras permanecemos disponibles para brindar apoyo y asesoramiento siempre que nos necesiten.