7 claves para tener equipos más creativos
Puedes crear las condiciones necesarias para que la creatividad fluya.
No es necesario tener la oficina más hipster del mundo, es posible diseñar las condiciones para que la creatividad fluya sin tirar la casa por la ventana, aquí tienes 7 claves para hacerlo.
1. Construir el mejor equipo.
Los grandes equipos hacen que las buenas ideas se conviertan en ideas geniales y que las ideas decentes se conviertan en ideas buenas.
Así que es importante crear el mejor equipo que puedas.
Contrata por el potencial, no por sus habilidades o logros actuales.
Si puedes, no pierdas la oportunidad de contratar a gente más inteligente que tú.
2. Contribuir como propósito.
¿Para qué compartimos nuestras ideas?. Inspira a tu gente para que contribuya a través de sus ideas.
Promueve la contribución como algo loable. Cada vez que alguien quiera contribuir con sus ideas promueve un ambiente de respeto, reconocimiento y gratitud.
Todos deben sentir ganas y también la libertad de comunicar cualquier idea a cualquier persona de la organización.
3. Crear un ambiente de confianza real.
Busca y corrige los obstáculos que impiden que la gente hable con franqueza y comparta sus opiniones con claridad.
Todo el mundo debería poder hablar con cualquiera, independientemente del puesto que ocupe.
Encuentra y elimina cualquier fuente de miedo en tu organización.
Ten cuidado cuando veas más honestidad en los “pasillos” que en las reuniones.
Da el ejemplo: muestra tus nuevas ideas pronto y con frecuencia. Deja que las personas de tu equipo o aquellas que sean importantes para ti, sean testigos de tu proceso.
4. Permitir y gestionar apropiadamente los conflictos.
Si alguien piensa que estás equivocado, mantente abierto al razonamiento detrás de sus conclusiones. Si crees que siempre tienes la razón, reprimirás los «puntos de vista alternativos».
No te focalices tanto en quien está en lo correcto, pon el foco en qué es lo correcto.
Cuidado con querer mantener la estabilidad, es importante permitir los conflictos constructivos, donde varios puntos de vista se encuentran y se enriquecen.
5. Reglas que permitan la creatividad.
Las reglas facilitan la vida en el mundo empresarial, pero también pueden impedir la adaptación.
Los problemas difíciles requieren de un pensamiento flexible, que permita responder con creatividad a lo inesperado.
Haz una revisión de las reglas en la empresa y cuestiona aquellas que coartan la creatividad.
6. Normalizar los errores.
Los líderes dignos fomentan un lugar seguro para que los empleados asuman riesgos, se equivoquen, aprendan.
La gente casi siempre malinterpreta el éxito o el fracaso.
El fracaso es un aspecto natural de arriesgar, de innovar, así que acepta los errores como parte del proceso de aprendizaje.
Confía en tu gente, confía en sus capacidades para aprender de sus errores y apóyalos cuando se equivoquen. Nunca se puede evitar el error.
Incluso aplica este principio a aquellos que tienen el trabajo de implementar proyectos, deben poder tomar decisiones fundamentales.
7. No perder de vista el objetivo final.
El proceso lo es todo, pero el proceso no es la meta.
No pierdas de vista el objetivo: hacer que el producto sea el mejor!